DIÁLOGOS CON CRISTINA JUNQUERO

CRISTINA JUNQUERO EN SU TALLER

CRISTINA CON SUS ALPARGATAS SOC NEGRO

Quedamos con Cristina en su taller en el barrio del Poble Nou en Barcelona, donde hace todas sus piezas a mano. Entrar en estos lugares siempre tiene algo de íntimo, de mágico. Es especial llegar a un lugar en el que se materializan las ideas que, hasta ese momento, permanecen en la privacidad de la mente del artista.

Entre moldes de piezas, herramientas y materiales, hablamos con ella del peso de la tradición familiar en su oficio y de la maternidad. En el Día de la Madre queríamos compartir tu experiencia (y el reto) compaginando la vida laboral, creativa y familiar.

MODELO: SOC NEGRO

Cristina, creciste rodeada de la joyería tradicional andaluza en la joyería de tu familia. ¿Cómo ha influenciado esta herencia en tu trayectoria profesional?

Me ha influenciado toda mi vida y en todo mi proceso vital. Desde pequeña tuve claro que me dedicaría a esto y el tenerlo tan claro ha sido gracias al tenerlo tan cerca. Siempre digo que mi abuelo, mi abuela y mi madre me han dejado la mejor herencia posible, que es un oficio que me apasiona.

Como hija que ha decidido dedicarse a un campo tan estrechamente relacionado con el negocio familiar, ¿podrías compartir alguna lección o consejo que hayas recibido y que haya marcado tu enfoque hacia la joyería?

Lo que he aprendido trabajando y estando detrás del mostrador desde pequeña, es más valioso que todas las titulaciones que pueda tener. He aprendido a entender al público, lo que es el sacrificio de un negocio propio, conocimientos de joyería y, sobre todo, me ha dado un imaginario que a día de hoy sigue formando parte de mi investigación y creación como joyera.

MODELO: SOC NEGRO

Ser emprendedora y madre presenta un conjunto único de desafíos y recompensas. ¿Podrías compartir cómo gestionas estas dos responsabilidades y qué aprendizajes has obtenido de cada una?

Me parece complejísimo cuando lo veo en otras madres y a veces se me olvida que estoy en el mismo barco, curioso. En mi caso, mi vida es un tetris y una agenda apretadísima no sólo por el trabajo y la maternidad, sino porque, además, desde que me quedé embarazada, estudio en la universidad.

No sé, yo trato de ser muy organizada y aun así no me salen muchas veces las cosas, pero sin duda, para que yo pueda hacer todo esto, el padre de mi hijo es fundamental y juntxs hacemos un equipo que lo hace posible.

También he tenido que reducir horas de taller. Donde antes hacía entre 8 y 12 horas diarias, ahora no puedo echar más de 5 y alguna tarde que rasco a la semana.

Igualmente, me siento afortunada de dedicarme a lo que me gusta y haber podido ser madre.

Hemos visto en tu Instagram que a veces llevas a tu hijo al taller contigo. ¿Cómo vives la experiencia de compartir esos momentos de creatividad y trabajo con él?

Si me llevo a Román al taller es síntoma de que no nos ha quedado otra, porque cada vez que viene me revoluciona y desordena todo y básicamente, no puedo hacer nada con él.

Al no tener familia ni red, cuándo se pone malito o no tiene cole, me lo tengo que traer al taller, pero nunca es una buena idea. De hecho, estoy tratando de contestar esta entrevista con sus deditos tecleando todo el rato.

Al compartir tu espacio de trabajo con tu hijo, seguramente surgen momentos de enseñanza y descubrimiento mutuo. ¿Hay alguna anécdota que puedas compartir sobre un momento especial?

A veces se pone las pulseras y me hace mucha gracia, pero luego descubre la cinta adhesiva y le parece una pulsera mucho más interesante que las que yo hago. Pero además de eso, creo que le gustan más las joyas de mi compañera de taller que las mías, porque siempre abre sus cajones de exposición y se las mezcla y las mías las deja intactas.

Desde tu experiencia, ¿Cómo visualizas el papel de las madres en la transmisión de la cultura y el arte?

En general el papel de las madres ni está valorado ni se tiene en cuenta en ningún ámbito. Yo he dado pecho a mi hijo hasta los 18 meses y no podía entender como tenía que dar pecho e ir a trabajar cuándo él sólo tenía 4 meses y aun así, yo soy autónoma y me podía llevar al niño o escaparme a darle pecho, pero quien tiene un trabajo remunerado, no sé cómo se puede.

En general ser madre me parece un reto a día de hoy en muchos aspectos.

Para terminar, ¿Cómo vas a celebrar este Día de la Madre?

Pues es curioso, pero todavía (3 días de la madre siendo madre) sigo pensando en mi madre más que en mí. Todavía no he asimilado del todo que este día me toca a mí también. No sé, supongo que me enviarán flores, besaré mucho a Romi y pasaré el día con él. Otro día más sintiéndome agradecida por tenerle en mi vida

¿Ya sabes cómo decirle a tu madre que la quieres? te damos algunas ideas: